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  • Motores Industriales

    Motores electricos

    Los motores son el corazón de innumerables sistemas industriales, desde bombas y compresores hasta cintas transportadoras y máquinas herramienta. Su eficiencia, robustez y fiabilidad los convierten en la opción preferida para aplicaciones de alto rendimiento. Sin embargo, como cualquier equipo eléctrico, no están exentos de fallas.


    Cuando un motor trifásico presenta problemas, las consecuencias pueden ir desde paradas inesperadas hasta daños costosos en la producción. Por eso, entender por qué puede fallar un motor trifásico es fundamental para prevenir interrupciones, aumentar la vida útil del equipo y garantizar la seguridad en el entorno de trabajo.


    En este artículo te explicamos las principales causas de fallo en motores trifásicos, cómo identificarlas a tiempo y qué medidas tomar para evitar que ocurran.


    ¿Qué hace exactamente?

    • Proporciona la fuerza necesaria para mover cargas mecánicas continuas o intermitentes, bajo diferentes condiciones de operación.
    • Mantiene la velocidad y el torque requeridos según la aplicación (diseño del motor, tipo: monofásico, trifásico, de inducción, síncrono, etc.).
    • Funciona en ambientes industriales que pueden ser exigentes: altas temperaturas, presencia de polvo, vibraciones, cargas pesadas, arranques frecuentes, etc.


    ¿Por qué necesitas uno?

    • Eficiencia operativa: permite automatizar y acelerar procesos productivos con precisión.
    • Consistencia y potencia: los motores industriales están diseñados para operar de forma continua con carga pesada, lo que hace posible tareas que un motor doméstico o de menor capacidad no podría sostener.
    • Duración y confiabilidad: bien mantenidos, los motores industriales ofrecen largos periodos de servicio, reduciendo tiempos muertos y costos de reemplazo.
    • Adaptabilidad: se pueden dimensionar para distintas potencias, voltajes, velocidad, condiciones ambientales; así se ajustan al requerimiento de tu planta o industria.




    Fallas en motores eléctricos​

    ¿Por qué falla un motor eléctrico?


    Un motor eléctrico es una máquina diseñada para ofrecer potencia y confiabilidad, pero, como todo equipo, puede presentar problemas a lo largo de su vida útil. La pregunta clave es: ¿por qué falla un motor eléctrico? La respuesta puede variar desde un mantenimiento inadecuado, condiciones de trabajo exigentes, hasta factores externos como sobrecargas, contaminación o vibraciones. Identificar estas causas a tiempo permite prevenir daños mayores, prolongar la vida útil del motor y garantizar la continuidad de tus procesos industriales.



    Consumo eléctrico elevado

    Ineficiencia energética del motor.

    Sobrecalentamiento

    Temperatura excesiva del motor.

    Pérdida de eficiencia

    Disminución del rendimiento operativo.

    Fallas frecuentes o paros imprevistos

    Interrupciones constantes del funcionamiento.

    Vibraciones o ruidos anormales

    Desbalance o desgaste mecánico.

    Aumento en el costo de mantenimiento 

    Reparaciones frecuentes y costosas.

    Obsolescencia tecnológica

    Tecnología antigua y limitada.

    Fugas eléctricas o cortocircuitos

    Pérdida de aislamiento o fallas eléctricas.

    Daño irreversible en el bobinado

    Falla crítica en el devanado.

    Necesidad de mayor capacidad o adecuación al proceso 

    Insuficiencia de potencia o rendimiento.

    Soluciones en caso de que falle un motor


    Incluso los mejores motores pueden fallar si no se atienden ciertos factores. Aquí te presento los problemas más comunes y cómo solucionarlos o prevenirlos, para mantener tus motores funcionando con fiabilidad.


    • Verificar que el motor esté correctamente dimensionado para la tarea. Instalar dispositivos de protección como relés o fusibles térmicos. Controlar regularmente el voltaje de alimentación. En algunos casos, usar variadores de frecuencia que ayuden con arranques suaves y control de carga.
    • Mantener limpias las entradas de aire, filtros, ventiladores; asegurarse de que haya flujo de aire adecuado. Monitorear la temperatura del motor, usar sensores térmicos o cámaras infrarrojas. Reducir cargas si es necesario. Seleccionar motores apropiados para el ambiente (grado de protección, temperaturas altas).
    • Lubricación regular con el tipo de grasa correcto, evitar sobre-lubrificar; sellos adecuados para evitar ingreso de polvo o humedad. Verificar alineamientos y montaje correcto. Análisis de vibraciones para detectar desgaste temprano. 
    • Mantener áreas limpias; usar carcasas y sellos protectores adecuados; elegir motores con grados de protección IP apropiados al ambiente. Instalar deshumidificadores, drenajes si corresponde; evitar condensación. Limpieza periódica externa e interna (cuando se pueda). 
    • Asegurar una buena alineación al instalar el motor; bases firmes y niveladas; montar acoplamientos flexibles si es necesario; análisis de vibraciones periódicos para prevenir daños crecientes. 
    • Inspecciones eléctricas periódicas: medir resistencia de aislamiento, pruebas megóhmicas; asegurarse de que las conexiones están bien apretadas y sin corrosión; evitar picos de voltaje; si es necesario, rebobinar con materiales de alta calidad. 
    • Implementar rutinas programadas de mantenimiento: inspecciones visuales, limpieza, lubricación, verificación de conexiones eléctricas, probar ventilación. Usar mantenimiento predictivo: sensores de vibración, termografía, análisis de circuito; registrar datos históricos para detectar tendencias.

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